El pasado mes de mayo muchas empresas importadoras en México se vieron afectadas con la publicación de nuevas medidas tanto arancelarias como no arancelarias por parte de la Secretaría de Economía, viéndose dañadas las operaciones de empresas pertenecientes principalmente a la industria siderúrgica.
La medida arancelaria contempla a 544 fracciones o partidas arancelarias que el Gobierno mexicano considera como sensibles para la industria productora nacional, aumentando o imponiendo tasas arancelarias que van del 5% al 50%. Una de las industrias que tuvo mayor afectación fue la siderúrgica, no solo por la medida arancelaria sino también por la obligación de presentar avisos automáticos de importación de productos siderúrgicos (permisos especiales). Si bien estos ya existían como un requisito para algunos de los productos de este sector, aumentaron de la noche a la mañana las fracciones arancelarias que requerían presentar estos avisos. Aunado a la incapacidad de personal de la Secretaría de Economía para responder a todas las solicitudes (ya que es necesario que la Secretaría los autorice previo a su importación), esto provoca que una cantidad muy elevada de mercancía se quede detenida en la aduana a espera de contar con la autorización para su importación.
La imposición de estas medidas viene en gran parte derivada de la presión que ha venido ejerciendo el Gobierno de Estados Unidos a México para que evite la supuesta triangulación de acero y aluminios asiáticos que entran a este país a través de México, beneficiándose del tratado de libre comercio de América del Norte (T-MEC). A esto, hay que sumarle el ambiente electoral que vive nuestro vecino del norte y el cambio de Gobierno actual en nuestro país. De hecho, es de relevancia mencionar que el pago de aranceles beneficia a la recaudación de la administración saliente.
Si bien la Secretaría de Economía busca proteger la producción de la industria nacional, consideramos que deben realizarse estudios más en profundidad para saber exactamente a qué productos por sector proteger y a cuáles no ponerles obstáculos a la importación, evitando dañar así a las cadenas de suministros de la industria. Un ejemplo lo tenemos con tornillos especiales para la industria automotriz, los cuales caen en una de las partidas afectadas y no existen productores ni en México ni en los Estados Unidos.
Otros sectores que se han visto afectados con estas medidas son la industria textil, del calzado, del papel, del caucho, de los productos químicos, del cartón, del vidrio y del material eléctrico, entre otros.
Recomendamos a las empresas importadoras en México que hagan un plan adecuado sobre los productos que pretenden importar para estar prevenidas y evitar que sus mercancías se detengan en la aduana, teniendo que hacer pagos imprevistos.